La holandesa Anna Van der Breggen ha ganado el oro de la prueba femenina de carretera de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, una medalla que acariciaba la estadounidense Mara Abbott, que ha sido cazada por sus tres perseguiidoras a falta de tan sólo 150 metros para la meta.

No fue la única desgracia del final de carrera porque, de nuevo en la peligrosisíma bajada final, se fue al suelo en una curva la líder de la carrera en el ese momento, la holandesa Annemiek Van Vleuten. Había dejado la compañía de Abott, con quien habçia conseguido fugarse y se le fue la bici en una curva a la derecha salieno disparada contra el bordillo y quedándose allí sin moverse, Rápidas, escasas y preocupantes imágenes. (Ver: Van Vleuten está consciente)

En el sprint Van der Breggen ha superado a la sueca Emma Johansson, plata, y a la italiana Elisa Longo-Borghini, bronce. Mara Abbott ha sido cuarta. Ane Santesteban ha terminado 47ª a 11 minutos de la ganadora, después de haber buscado su protagonismo durante la carrera.

La subida y la bajada final han mostrado lo más emocionante del ciclismo femenino. Continuos ataques subiendo y bajando y tensión hasta la línea de meta. Tras la caída de Van Vleuten, Mara Abbott, que había perdido unos metros con respecto a ella por la habilidad de la neerlandesa en la bajada, se ha quedado en cabeza en solitario. Tenía 11 kilómetros por delante y unos 40 segundos de ventaja.

La estadounidense se ha lanzado cuesta abajo sintiendo el aliento en el cogote de tres perseguidoras: Van der Breggen, Longo Borghini y Johansson. Al llegar al llano, Abbott lo ha dado todo, pero las tres se han entendido bien porque entre otras cosas tenían a cuatro corredoras en su busca que hacían lo mismo, sabedoras de que allí había medalla.

La emoción ha marcado los últimos kilómetros. A 8 km Abbott tenía a 37 segundos al trío perseguidor; a 6 km la estadounidense tenía a las res a 36" y estás, al cuarteto a 9"; a 4 km Abbott aguantaba con 28 segundos y las tres con 16; a 2 kilómetros las diferencias eran de 17 y 12 segundos; en el paso de la pancarta del último kilómetro, el trío se acercaba peligrosamente y Abbott empezaba a desfallecer y sólo tenía 10 segundos sobre el trío, que manteneía 15 sobre el cuarteto. A falta de 150 metros para la meta, el sueño de Abbott se terminó y Anna Van der Breggen se llevó el gato al agua y el oro olímpico, la plata y el bronce también estaban contentas; Mara Abbott, no tanto.

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